Ecce Venio (Aquí Estoy Señor para hacer tu Voluntad)
Para construir el Reino se requiere cultivar una actitud personal de abandono confiado y de generosidad: Dejarse moldear por Dios un corazón cada vez más disponible a la voluntad de Dios. La voluntad divina no es otra que la plenificación total de la dignidad de los hombres y mujeres y de la creación entera.
Adveniat Regnum Tuum (Que Venga tu Reino)
El compromiso solidario en la transformación de este mundo mediante la construcción del Reino de Dios en sus dimensiones personal, social y cósmica. Este compromiso brota de la configuración de su corazón al Corazón de Jesús.
Sint Unum (Que Sean Uno)
Para concretizar el proyecto del Reino en el presente y, a la vez, ser signo anticipatorio del Reino escatológico, Jesús nos propone fomentar y vivir la comunión. La fraternidad es testimonio vivo de la participación responsable en función de un proyecto común, dentro de un marco de tolerancia, de respeto, de diálogo y de aceptación integradora del otro diverso, porque reconocemos en él a otro hijo de Dios, hermano nuestro